
El caso que involucra a la vecina de Urdampilleta Soraya Solano ingresará en los próximos cinco días en una etapa de definiciones. De acuerdo a los elementos que puedan reunirse, la mujer, que está imputada en la causa “Homicidio en grado de tentativa agravado por el vínculo”, podrá ser procesada, sobreseída o declarada inimputable, si los peritajes psiquiátricos revelan que padece el Síndrome de Münchausen.
No hay otras alternativas, mientras tanto, la sociedad urdampilletense en particular, Bolívar, en gran parte, y el país todo, aguardan con alta expectativa el dictamen de la Justicia.
La situación de Solano es sumamente comprometida aunque a muchos esta afirmación les suene terrible e inaceptable. Y que sea comprometida, no significa que sea culpable, si no que las diligencias ordenadas hasta el momento han establecido una orientación hacia lo que puede haber hecho o no esta madre de 27 años, a quien su pueblo, aún observa con pena por el trance que le toca vivir.
Es sumamente comprometida desde el mismo momento en que la Justicia dispuso el allanamiento de su casa (FOTO) el 16 de julio, diligencia que este sitio de modo primicial informó a sus lectores para que luego la noticia trascendiera a los medios locales, y luego a los nacionales.
El grado de compromiso puede medirse en la decisión de una justicia garantista como la de nuestro distrito, que no caprichosamente ordenaría una actuación de esta naturaleza.
Cuando se ordenó el procedimiento, ya había indicios demasiado claros.
LAS CLAVES
Para tomar una determinación, la Justicia espera básicamente:
-Los peritajes a la mujer y a su marido.
-Los resultados histológicos tras la exhumación de los cuerpos para establecer si coinciden las muestras extraídas con los medicamentos secuestrados en la vivienda.
-Comprobar si las pericias psiquiátricas arriban a la diagnosis del renombrado Síndrome de Münchausen por poder.
-Establecer si Solano recibía medicamentos de su padre, un farmacéutico radicado en Coronel Suárez.
-Evaluar los numerosos testimonios logrados en Urdampilleta en las últimas semanas.
EL TRATAMIENTO PERIODISTICO
Mucho se ha escrito, hablado y mostrado en los medios de comunicación locales, regionales y nacionales sobre este raro caso que atrapa la atención de la sociedad.
Se ha dicho a su vez, que cierto tratamiento es frío y desalmado sobre el caso, sin atender que éste, no ha sido un invento de la prensa y que cada cual, sabrá de acuerdo a su forma de relatar los hechos, hasta donde puede llegar sin faltar a la verdad, que es el único objetivo del periodista.
Si duele o si impacta, por supuesto que es lamentable. Al periodista le duelen este tipo de episodios cuando se dificulta –tal como se hace en la medicina- el practicar la no transferencia.
Lo que no se puede tolerar periodísticamente es que comunicadores encargados de llevar sin preconceptos la realidad a la gente, se rasguen las vestiduras al utilizar eufemismos. Los eufemismos sirven para disfrazar la realidad. Nada más contrario a la honestidad periodística.
Lo que es blanco es blanco y lo que no, no. Excepto algunos casos aislados que directamente acusaron de envenenadora a Soraya (y deberán hacerse cargo), el resto de los medios y sitios digitales de estas características se han basado en información concreta para referirse al tema.
A partir de algunas hablillas, es ciertamente saludable aclarar que publicar la foto de Solano no la hace culpable y que mencionar el nombre de los infortunados hermanitos no les devolverá la vida. Son –exactamente- elementos y datos periodísticos de primer orden.
5 comentarios:
LA COBERTURA ES BUENA. HAS RELATADO LOS HECHOS SIN ABRIR JUICIO.
cuánto tiempo falta para que se de un veredicto?
totalmente de acuerdo
agrego totalmente de acuedo con los conceptos del artículo periodístico.
Nosé por qué lo decís. El tema está bien encarado.
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