sábado, 16 de marzo de 2013


A NO SER QUE RENUNCIE FRANCISCO

Por Oscar Bissio


 La designación de Jorge Bergoglio en el Vaticano provocó un milagro en la Argentina. Se terminó la inseguridad.
Hace tres días que divinamente no hay robos, asaltos, violaciones, entraderas, salideras, títulos catástrofe, ni delitos. Por lo menos a saber por las ofertas de las pantallas de la televisión.
La rara devoción superó holgadamente a la vocación amarillista que todos los días manifiestan las cadenas de noticias opositoras al Gobierno.
La cara, la historia, los zapatos, el vestido, la cruz, y todo lo que pueda imaginarse del nuevo primado reemplazaron en estas horas a la cruzada mediática que cotidianamente acribilla sin miramientos las mentes enanas que quedan perplejas e indignadas por tanta inseguridad.
Es que como un milagro del cielo en estos días no ocurrió nada?. 
Entonces, este acontecimiento, raramente celebrado por millones de argentinos, sirve para el análisis.
Hay una pensada ablación quirúrgica de los medios corporativos y enemigos del modelo al cerebro de muchos argentinos que por estas horas olvidaron esa perplejidad e indignación hipócritas por tanta inseguridad.
Es que ciertamente creerán que mientras Bergoglio monopolizaba las pantallas del mundo, aquí no sucedió lo que sucede cada día y que esos mismos medios y su pernicioso mensaje se potencian hasta llegar a la médula de esta nueva nociva clase media?.
Claro que con seguridad se produjeron delitos tal como ocurre todos los días, pero como la manipulación mediática les dio un descanso pareciera que nada ocurrió en materia delictiva.
Una muestra gratis, en consecuencia, de como se puede torcer el pensamiento y la idea de una sociedad.
Hacerla ciclotímica y obligarla desde la pantalla a que pase de la perplejidad y a la indignación por el crimen de Junín a la devoción exponencial.
"Se produce un intervalo que puede ser extremadamente breve, de animación suspendida, una especie de shock o parálisis psicológica a una escala masiva", dice Naomi Klein en "The Shock Doctrine".
La Klein, casi que traza una paralelismo con García Márquez en "La Cándida Eréndira".
En lugar de abuela y nieta, o desarrollo y subdesarrollo, refiere a la estrategia de las lobotomías literales y las económicas de los pueblos en shock.
Aquí, la corporación eligió estratégicamente aprovechar el shock papista para demostrarse a sí misma cuando hay inseguridad y cuando no.
Demostrarse que puede hacerle repetir a la masa shockeada y desbordada de emociones histéricas lo que se le antoje. 
Hasta uno mismo tiene temor de caer en la trampa ante tanto fusilamiento mediático y sensibilizarse a favor del hombre que pareciera venir a representar al capitalismo salvaje en su lucha por destrozar los sueños de igualdad de la América Latina.
Al que pareciera que viene por la sinergia de un continente que amenaza con quitarlos del liderazgo mundial.
Uno tiene que advertirse a sí mismo sobre la manipulación extrema de los monopolios que hoy dominan el mensaje para no caer en esa trampa.
A advertirlo entonces, porque en unas horas volverá la inseguridad por decisión de los medios. A estar atentos.
A no ser que renuncie Francisco. 

1 comentario:

Anónimo dijo...

Hello. And Bye.